River Plate no pudo pasar del 0-0 ante Independiente en una deslucida actuación, cediendo puntos clave en su lucha por la cima de la Zona B del Torneo Clausura. El equipo de Marcelo Gallardo se mostró sin ideas, no generó peligro y dependió de las intervenciones de su arquero, Franco Armani, para evitar la derrota.
El partido, disputado en el Estadio Libertadores de América, dejó un sabor amargo para el Millonario. A pesar de que el resultado lo mantiene en la punta de la tabla, una victoria de Riestra podría relegarlo al segundo lugar. Lo más preocupante para el cuerpo técnico es la falta de fluidez en el juego y la grave lesión de Germán Pezzella, quien se suma a la lista de bajas antes del crucial duelo de octavos de final de la Copa Libertadores.
Independiente, por su parte, demostró una mejoría notoria bajo la dirección de Julio Vaccari. A pesar de no haber conseguido la victoria, el Rojo fue superior en el desarrollo del juego, presionó a River y generó las ocasiones más claras. El público local reconoció el esfuerzo del equipo con aplausos, señal de que, aunque el resultado no fue el esperado, el rendimiento dejó una buena impresión de cara al futuro.
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