
Debido a una combinación de factores, incluyendo resultados insatisfactorios, la presión de los hinchas la directiva, y la falta de un rendimiento consistente del equipo. La situación se volvió insostenible, lo que llevó a la decisión de dar un paso al costado.
Diego Martínez asumió la dirección técnica de Boca Juniors en un contexto complicado, enfrentando la presión de dirigir a uno de los clubes más grandes de América. A lo largo de su gestión, el equipo no logró los resultados esperados, lo que generó descontento tanto en los hinchas como en la dirigencia.
Algunos de los factores que influyeron en su renuncia incluyen:
- Resultados Irregulares: Boca tuvo un rendimiento inconsistente en los torneos, lo que llevó a la eliminación en competencias clave y a una falta de triunfos en partidos importantes como el ultimo clásico argentino contra River Plate en la Bombonera.
- Expectativas Altas: La historia y el prestigio de Boca crean altas expectativas, y los hinchas suelen ser muy exigentes. La falta de títulos durante su mandato contribuyó a la presión.
- Relación con la Dirigencia: La comunicación y el apoyo de la directiva son esenciales en momentos difíciles. Hubo indicios de descontento en cuanto a la dirección del equipo, lo que pudo haber afectado su estabilidad.
- Protestas de los Hinchas: Los seguidores del club hicieron sentir su descontento, lo que complicó aún más su situación.
- Futuro del Club: Tras una serie de malos resultados, la directiva podría haber considerado que un cambio era necesario para intentar revitalizar al equipo.
Después de su renuncia, se generaron muchas especulaciones sobre su futuro y sobre quién sería su sucesor.